Los cuidadores son una pieza fundamental para personas con discapacidad que no pueden valerse por si mismas en diversos aspectos
Que importante es la figura de un cuidador para una persona con discapacidad física o en situación de dependencia. Estas personas dedican su vida a cuidar a los demás, una labor encomiable y que merece muchísimo más reconocimiento del que tienen.
Los cuidadores están expuestos a un trabajo muy físico, ya sea porque los pacientes tienen que ser transferidos de la cama a la silla de ruedas o al WC.
Este sobreesfuerzo ocasiona en la mayoría de ocasiones problemas de salud al cuidador, por ello, realizar una buena labor y seguir una serie de consejos, es fundamental para poder seguir con la labor en todas sus plenitudes.
Consejos para evitar lesiones
Los problemas de espalda son los más comunes en los cuidadores. Otros, sin embargo, aparecen con el paso del tiempo y pueden seguir por un tirón o de forma progresiva. Estos problemas pueden venir por:
- Grandes esfuerzos de manera cotidiana
- Movimientos bruscos
- Mantener una misma posición durante un tiempo prolongado
- Posturas que aumentan determinadas curvas fisiológicas
Además, a estos riesgos hay que sumarles un posible mobiliario inadecuado, falta de espacio o el estrés que puede producir trabajar como cuidador, ya que no es un trabajo para el que sirva todo el mundo.
La higiene postural, es una pieza fundamental en el trabajo de los cuidadores. Es muy importante cuidar la zona lumbar, puesto que padecer un problema en esta zona puede ser incompatible con la labor. Además, los cuidadores están expuestos a diversas lesiones físicas como hernias, contracturas o luxaciones.
Transferencias seguras a una silla de ruedas
Este movimiento es uno de los más comunes para los cuidadores. El hecho de transferir una persona de una superficie a otra tiene diferentes claves para lograr no lesionarnos en el acto.
Algunos consejos son:
- Agarra al paciente por los hombros, caderas, codos y tobillos
- Haz fuerza con las piernas y no con la espalda para levantar
- Separa los pies para una mejor base de apoyo
- Pisa con la planta del pie, nunca de puntillas
- Mantén la espalda recta mientras haces un pequeño arco en la parte inferior
- La persona debe estar lo más cerca posible del cuerpo del cuidador
- Haz los giros sobre piernas y no sobre el abdomen
- Evita la inclinación del tronco hacia delante para cuidar la espalda
Consejos para llevar a cabo movilizaciones
Las movilizaciones ayudan a prevenir atrofias musculares, la rigidez articular o úlceras de presión en el paciente, por lo que son fundamentales para la circulación sanguínea.
Estos movimientos se realizan sobre una misma superficie y lo más recomendable es que el cuidador tenga una tabla de rotaciones personalizada para tener un mejor control sobre las posturas de los pacientes. Algunos consejos para las movilizaciones son:
- No realizar cambios bruscos al paciente
- Evitar el contacto directo con las lesiones
- El paciente debe intentar cambiar en la medida de los posible su postura
Fuente: tododisca.com