Las personas que se encuentran a la espera de dicha atención ascienden hasta las 426.000 en el país español, algo que no aumentaba desde 2016
Hasta 426.000 personas se encontraban a la espera de recibir atención a la dependencia en España en 2019. Esto supone 50.000 más que a finales del año anterior, según el XX Dictamen del Observatorio de la Dependencia.
Además, destacan que se trata de la primera vez desde 2016 que aumenta el número de personas con necesidad de recibir este tipo de ayuda.
En concreto, hay 266.000 personas en la lista de espera para recibir atención de dependencia. Esto supone 20.000 personas más que en 2018.
A esto hay que sumarle que otras cerca de 160.000 personas se encuentran pendientes de valoración, 30.000 más que en el ejercicio anterior.
El documento pone de relieve que en ocho regiones españolas ha crecido la lista de espera de dependencia en 2019. A la cabeza se sitúa Extremadura (7,9%), seguida de Asturias (7,8%), Comunidad de Madrid (4,3%), Región de Murcia (3,9%), Islas Baleares (3,3%), Comunidad Valenciana (1,9%), Galicia (0,6%) y la ciudad autónoma de Melilla (0,3%).
Según el informe del Observatorio, recogido por Europa Press, el 42% de las personas desatendidas en 2019, es decir, 113.275 en total –15.000 más que el año anterior– son dependientes con Grados III o II, con necesidades de apoyo extenso y en ocasiones continuado.
«Se ralentiza» el incremento de beneficiarios
Además, los autores del estudio de dependencia concluyen que en 2019 «se ralentiza» el incremento de personas beneficiarios, ya que el aumento de personas que sí fueron atendidas fue un 39% inferior que el año anterior (con 99.444 beneficiarios en 2018 y 60.904 en 2019).
En relación con el plazo de tramitación, se sitúa en una media de 426 días de media, «con grandes variaciones territoriales», según denuncia el Observatorio, que añade que al ritmo de incorporaciones de beneficiarios de 2019 se tardarían casi cinco años en lograr la plena atención.
Por normativa, el plazo máximo para resolver un expediente de dependencia se sitúa en seis meses (180 días), pero solo hay cuatro territorios por debajo o cercanos a ese margen en sus promedios: las ciudades de Ceuta (70 días) y Melilla (170); el País Vasco (137); Navarra (155) y Castilla y León (191). En el otro extremo se sitúan Canarias (785 días); Extremadura (675); Andalucía (621) y Cataluña (576).
El dictamen pone de relieve que el 3% de la población española necesita apoyos para desarrollar actividades básicas de la vida diaria. De este modo, a 31 de diciembre de 2019 había en España 1.385.037 personas en situación de dependencia reconocida y otras 159.193 pendientes de valoración.
Más mujeres que hombres
Según los datos del Observatorio Estatal para la Dependencia, 1.115.183 personas recibían prestaciones o servicios del sistema por su situación de dependencia al finalizar 2019, lo que representa 60.908 más que un año antes (+6,4%). Del total de personas con dependencia reconocida, el 65% son mujeres y el 35%, hombres. El 72,6% de los dependientes reconocidos tiene más de 65 años y los mayores de 80 son el 54,2%.
Por otro lado, el dictamen sostiene que la pérdida de recursos económicos en dependencia desde 2012 asciende a 5.864 millones de euros considerando la supresión del nivel acordado, la reducción del nivel mínimo y la supresión de las cotizaciones de cuidadoras familiares. «El recorte a la dependencia es el único recorte de los años crisis, que aun no ha sido recuperado», advierte.
En este sentido, apunta que un total de 8.891 millones de euros es el coste directo de las prestaciones y servicios entregados durante 2019, de los cuales las administraciones públicas aportaron 7.050 millones de euros y 1.840 millones los usuarios «en forma de copago regulado», lo que supone un 20,7%.
«Del gasto público directo en dependencia en 2019, la administración general del Estado soportó el 20% y las comunidades autónomas el 80%. Muy lejos de la pretendida aportación al 50%», denuncia el dictamen, que añade que el Sistema de Atención a la Dependencia en 2019 generó 263.024 empleos directos, 16.000 más que el año anterior. El impacto sobre el empleo es de 37,3 puestos de trabajo por cada millón de euros invertido, ha subrayado.
Fuente: tododisca.com